Mil grullas

Me he preguntado si usar estas palabras prestadas, si robar un poco más de lo que demanda mi plusamor, si hablar de quemar mil grullas y todas las naves por esta cercanía inexacta y necesaria.
Mi piedrita es una piedra preciosa de posibles imposibilidades que me acercan al cielo, a saltos agigantados y esquizofrénicos (sin juegos de palabras) y ahí estamos. Así estamos por ahora, detrás de estas vidrieras noctunas y de estos latidos eléctricos, tan pobres.

"Fíjese que sueño más extraño tuve"...el de tenernos. Fijesé que me la paso practicando caricias en sus pájaros rojos, naranjas y amarillos. Fijesé, la siento testigo, eXpectadora y parte, parte de esta madeja -de mí- que desenredo y que debe ser roja como todas sus palabras.
Fijesé que la quiero... pero el amor debe ser un animalito insignificante cuando no se puede o no se deja tocar...




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