FABULACIÓN




FABULACIÓN

Me invento que no existe el lodo de tu nombre
con que armaba la vida -mi mentira piadosa-,
me invento que no hay ojos que mires, ni mirada,
ni sal entre esas sábanas de hotel de medio pelo,
ni esqueletos de besos que aquí, en mi boca, queden.

Me invento un universo discreto y realista,
las pistas de otros cuerpos insípidos recorro.
Un mundo saludable, sin vértigo, me invento,
equilibrista torpe sobre un hilo invisible.

Para extrañarte menos te invento piel de olvido,
me esfuerzo en que parezcas algo que no se siente,
que nunca se ha sentido ni volverá a sentirse;
te niego cuatro veces en lo que canta un gallo
y en medio de mi cama te crucifico y pido
que ya no resucites en un nuevo recuerdo.

Igual, duermo, respiro y vivo si hace falta
pero es la nada: nada, cuando la ausencia pide,
a gritos, llenar pronto -de vos- este vacío.


Comentarios

Entradas populares